lunes, 23 de junio de 2008

La facilitación del comercio, supeditada al transporte

Las pymes argentinas que pretenden internacionalizarse se enfrentan con barreras comunes a las del resto de los países en desarrollo. Los obstáculos de acceso a los mercados naturalmente compradores de sus manufacturas se presentan bajo la forma de aranceles o cuotas de ingreso que minimiza de entrada una posible competitividad por costo de producción y precio de venta final.

No obstante, es en el marco de las negociaciones internacionales que se pretende franquear los artificios comerciales.

Sin embargo, no suele esgrimirse el argumento de la logística comercial en su impacto en las cadenas globales de valor.

Así como las pymes son las más perjudicadas por su menor economía de escala en lo que hace a acceso a mercados internacionales, son también las más golpeadas en su competitividad a más distantes estén de sus clientes potenciales.

La facilitación del comercio está supeditada a la facilitación del transporte internacional.

Y esto es así porque una condición necesaria para integrar una cadena global de valor es contar con una infraestructura de almacenamiento y transporte fluida, sin demoras, continua.

Internacionalizar una pyme no se limita a la exportación de su producto, aún cuando ello signifique una constante y parte de la estrategia de la empresa. Lo que implica es todo un conjunto de acciones que la hacen internacional, y la máxima expresión de ello podría ser qué tan global es su cadena de valor. Y, como esto no es un concepto abstracto, sigue siendo clave la integración física, hacia atrás y adelante, con eslabones en el exterior. Y aquí la facilitación del transporte es medular.

No hay comentarios: